Marcos 2, 13-17
En aquel tiempo, Jesús salió de nuevo a la orilla del mar; toda la gente acudía a él y les enseñaba. Al pasar, vio a
En aquel tiempo, Jesús salió de nuevo a la orilla del mar; toda la gente acudía a él y les enseñaba. Al pasar, vio a
San Hilario, obispo y doctor de la Iglesia, que fue elevado a la sede de Poitiers, en Aquitania (hoy en Francia), en tiempo del emperador
La misericordia de Dios es infinita. El mayor de los pecadores puede, con toda confianza, acudir a pedirle perdón, pues, si el arrepentimiento es sincero,