La santidad está reñida con la tristeza. Por eso, en las vidas de los santos siempre encontramos que vivían con gozo sus esfuerzos, sufrimientos y cansancios. Incluso cuando entregaban su vida por Dios, lo hacían valientemente y en muchas ocasiones, cantando. Porque ser santo es como vivir la celebración pascual, pensando que pronto nos encontraremos con el Señor que, tras padecer por nosotros, resucitó y nos está esperando.
![Puedo decir que los gozos más bellos y espontáneos que he visto en mi vida son los de personas muy pobres que tienen poco a qué aferrarse – Papa Francisco Puedo decir que los gozos más bellos y espontáneos que he visto en mi vida son los de personas muy pobres que tienen poco a qué aferrarse – Papa Francisco](https://c2.staticflickr.com/8/7915/32005590717_f7151954f1_o.png)
Tengo mucho más de lo que necesito para vivir. Busco tener más, creyendo que cuanto más posea seré más dichoso. Me engaño a mí mismo