La fuerza interior, si está dirigida desde el Señor, nos lleva a construir, paso a paso, pero sin desmayo. Lo importante es comenzar y perseverar. Nada resultará imposible, aunque al principio, cuando iniciamos el camino, lo veamos inalcanzable. Si confiamos en quien todo lo puede, las dificultades que encontremos en el camino serán siempre superadas.
A veces confundimos el amor con otras muchas cosas que los hombres hemos inventado para justificar nuestros egoísmos personales. Quien ama de verdad tiene que